El presidente de Chile, Sebastián Piñera, oficializó ayer que antes de la conclusión del primer trimestre de 2011 suscribirá con su par boliviano, Evo Morales, la concesión de un corredor sin soberanía por el plazo de 99 años por el puerto de Arica, en la Línea de la Concordia, es decir en el límite con la república de Perú.
En declaraciones al diario chileno La Tercera, Piñera dijo que el acuerdo fue alcanzado el pasado 19 de diciembre durante un encuentro bilateral entre ambos mandatarios en Foz de Iguazú (Brasil) durante la última cumbre del Mercosur. En la ocasión, se acordó firmar el pacto final revisado a la conclusión del primer trimestre de 2011. Incluso Morales, propuso que fuera el 23 de marzo, día del mar, “lo que a mí me pareció excelente”, dijo Piñera.
El Presidente chileno explicó que se trata de un corredor de siete kilómetros de ancho entre la frontera con Perú y la ciudad chilena de Arica, al norte del río Lluta, 2.070 kilómetros al norte de Santiago, aprovechando la buena disposición de Perú de no interponer condiciones previstas en el pacto de 1929, que establece que ese país tendría la última palabra si los territorios son transferidos a un tercero, en este caso Bolivia.
Piñera, además, había descartado la posibilidad de entregar un enclave en una costa sureña, como se había negociado anteriormente, debido a que –según dijo– no le parecía geopolíticamente correcto dividir el territorio chileno.
Morales y Piñera alcanzaron los acuerdos en el marco de la agenda de 13 puntos, que ya exigía para el siguiente encuentro “propuestas concretas” a la demanda marítima boliviana. Estas propuestas debían ser expuestas en el último encuentro de los vicecancilleres Fernando Schmidt (de Chile) y Mónica Soriano (de Bolivia) en noviembre pasado. Sin embargo, Piñera sorprendió anunciando que el acuerdo ya estaba alcanzado y aprobado por el Parlamento chileno .
Si usted amigo lector, siguió hasta aquí, le deseamos un feliz día de inocentes.