Haciendo uso de todo su derecho Bolivia ha vuelto a plantear en el seno de la Asamblea de la ONU, de pedir a Chile una salida soberana al Mar, a causa de la Guerra del Pacífico de 1879. Lo que criticamos sin pelos en la lengua es la forma de efectuar el reclamo. Como se trata de una chambonada del Canciller y del propio Jefe de Estado, se menciona la otra manera. Documentada, seria, un texto pulido y graficado refutando las razones chilenas, que las conocemos de sobra y que nada le costaba a la Cancillería preparar una carpeta, en los idiomas más usuales inglés, francés, chino y ruso si se quiere, de tal manera que las réplicas que se sucedieron de inmediato la del Canciller Moreno y del propio Presidente Piñera, hubiesen estado previamente confrontadas. Lo que hace el Vice, es más de lo mismo, "pedir un cambio de actitud" es más de lo mismo. No lo habrá hasta tanto Bolivia en el plano histórico y testimonial ofrezca un trabajo serio. Cómo pudo Morales mencionar la OEA de Tiquipaya, cuando fracasó la Cancillería en lograr el más mínimo respaldo a la demanda boliviana. No hubo un sólo Estado que nos hubiera respaldado.
El vicepresidente Álvaro García Linera dijo este lunes que espera un cambio de actitud en el Gobierno de Chile para encontrar “salidas negociadas” que permitan solucionar la demanda marítima boliviana, por lo que rechazó la agresividad del discurso pronunciado por las autoridades chilenas ante la posición del presidente Evo Morales, quien pidió a la Organización de Naciones Unidas (ONU) acompañar el proceso de solución del conflicto marítimo, tras no lograr, de manera bilateral, una solución a este problema.
En conferencia de prensa, la autoridad dijo que es inaceptable e injustificable el discurso agresivo y violento por parte del Gobierno chileno, que muestra la debilidad histórica y jurídica de sus argumentos, frente la justeza “de nuestra razón histórica y argumentos jurídicos que son los que van a triunfar tarde o temprano”, por lo cual espera que más pronto que tarde “reafirmamos nuestra hermandad con el pueblo chileno”, a quien “se respeta y se quiere mucho.”
Reiteró que Bolivia nació con mar, pero tras una guerra “injusta y abusiva” (1879-1883) se nos quitó el Litoral: “Un convenio firmado a punta de bala y de amenaza de nueva invasión el año 1904, viabilizó esa expropiación de nuestro territorio patrio, pero está claro que el tema sigue pendiente y seguirá pendiente y en pleno siglo XXI un país moderno civilizado que busca buenas relaciones con los vecinos está obligado a cambiar de actitud”.