lunes, 18 de julio de 2011

Chile no ha dejado de enterar a la opinión pública de las acciones de Bolivia en torno al Tribunal Internacional de La Haya que sigue un proceso entre Perú y Chile por aguas territoriales.


LA SEMANA pasada, sólo horas después de que Chile entregara a la Corte Internacional de La Haya el documento con el cual refuta los argumentos de Perú para modificar el límite marítimo, el gobierno de Bolivia hizo público que había entregado a ese tribunal una nota diplomática pidiéndole no afectar lo que llamó "derechos expectaticios" de ese país sobre el territorio marítimo que es objeto de la demanda presentada por Perú en contra de Chile.  Ello, en virtud de la aspiración boliviana de eventualmente obtener una salida al mar.
Si bien La Paz pidió expresamente no ser considerada un tercer actor en el juicio, el gobierno chileno reaccionó de inmediato ante la nota paceña recalcando que "Bolivia carece de todo fundamento jurídico para reclamar un acceso soberano al Océano Pacífico por territorios que pertenecen a Chile". Esta respuesta fue tan oportuna como acertada, pues Chile sustenta su postura -como volvió a puntualizar la Cancillería en esta ocasión- en que su frontera con Bolivia quedó fijada definitivamente en el Tratado de Paz y Amistad de 1904 y en que ese país no es parte de los tratados de 1952 y 1954 que fijan el límite marítimo entre nuestro país y Perú.
En todo caso, la nota presentada por Bolivia también sirve para recordar a los jueces de La Haya que su fallo en el juicio entre Chile y Perú lleva implícitas consecuencias para la región. Ecuador ya demostró el punto cuando hizo ver al tribunal que su límite con Perú está definido a partir de un criterio distinto (la línea del paralelo) al que este país quiere aplicar ahora en su límite con Chile (la línea bisectriz), y en función de los mismos tratados. La pretensión boliviana podría abrir la puerta a escenarios aún más complejos y potencialmente conflictivos para la región, algo que el tribunal internacional podría tener en cuenta en sus deliberaciones.

miércoles, 13 de julio de 2011

puntuaciones. Chile asegura que con Perú lleva el tercer debate. Que Bolivia acepta y respeta el Tratado de Paz y Amistad de 1904. por tanto no tiene porqué interferir. refuerzo de fronteras, ojo!

La Cancillería chilena respondió hoy a Bolivia, luego de que ese país enviara una nota diplomática a la Corte Internacional de Justicia de La Haya con el objetivo de establecer los "derechos" que tendría La Paz sobre los territorios que abarca el litigio limítrofe entre Chile y Perú.

El subsecretario (S) de Relaciones Exteriores,Alfonso Silva, leyó hoy una declaración pública preparada por la Cancillería, en la que desestima la reclamación efectuada por Bolivia ante el tribunal internacional, afirmando que La Paz carece de fundamentos jurídicos que sustenten su tesis.

"Bolivia carece de todo fundamento jurídico para reclamar un acceso soberano al Océano Pacífico por territorios que pertenecen a Chile. Los límites entre Chile y Bolivia fueron establecidos con precisión hace más de 100 años en el Tratado de Paz y Amistad de 1904, el cual es reconocido y respetado por ambos países y se encuentra plenamente vigente", dice el documento.

Asimismo, la declaración de Cancillería hace presente que "Bolivia no es parte de los tratados de 1952 y de 1954, por lo cual no tiene derecho alguno para intervenir en el proceso contencioso sometido por Perú a la jurisdicción de la Corte Internacional de Justicia".

"Chile hace total reserva de sus derechos ante la pretensión de Bolivia de atribuir connotación jurídica al planteamiento político e interpretaciones antojadizas, y reitera, una vez más, como lo ha hecho ante las cláusulas pertinentes de la Constitución de Bolivia, que tales pretensiones son infundadas e inoponibles al Estado Chileno".

martes, 12 de julio de 2011

Chile vuelve a negar que Bolivia tenga derechos sobre el Pacífico. la Cancillería en lugar de acciones contundentes camina a la deriva. los bolivianos exigimos mayor seriedad y efectividad al Canciller

El Gobierno chileno aseguró hoy que Bolivia "carece de todo fundamento jurídico" para reclamar un acceso soberano al mar por territorios que pertenecen a Chile y "no tiene derecho alguno" a intervenir en el litigio que Perú mantiene contra ese país.

El Ministerio de Relaciones Exteriores respondió a través de un comunicado a la presentación de una nota diplomática que Bolivia entregó en la Corte Internacional de Justicia (CIJ) de La Haya para dar a conocer su posición frente a "su derecho al acceso soberano" al mar.

Bolivia informó ayer de la presentación de esa nota diplomática, que entregó el pasado viernes en el marco del litigio en la CIJ con el que Perú pretende modificar a su favor el límite marítimo con su vecino del sur.

Perú busca ganar 35.000 kilómetros cuadrados de mar actualmente bajo soberanía chilena con el argumento de que los límites nunca han sido fijados, lo que Chile rebate con dos tratados, firmados en la década de los cincuenta, que según Lima son solo pactos pesqueros.

Por su parte, Bolivia perdió su acceso al Pacífico en una guerra que libró contra Chile a fines del siglo XIX, y desde entonces ese asunto ha dificultado los vínculos entre ambos países, que desde 1978 no tienen relaciones diplomáticas a nivel de embajadores.

El Gobierno chileno insistió hoy en que "los límites entre Chile y Bolivia fueron establecidos con precisión hace más de cien años, en el Tratado de Paz y Amistad de 1904, el cual es reconocido y respetado por ambos países y se encuentra plenamente vigente".

La Cancillería recalca además que Bolivia no es parte de los Tratados de 1952 y 1954, por lo que a su juicio "no tiene derecho alguno para intervenir en el proceso contencioso sometido por Perú a la jurisdicción" de ese tribunal de Naciones Unidas.

Según el Ejecutivo chileno, Bolivia reconoce este aspecto en la nota que envió a la Corte, lo que en su opinión "pone de relieve la ausencia de fundamento jurídico de su presentación".

Por último, advierte de que "Chile hace total reserva de sus derechos ante la pretensión de Bolivia de atribuir connotación jurídica a planteamientos políticos e interpretaciones antojadizas", y reitera que "tales pretensiones son infundadas e inoponibles al
Estado chileno".

La aspiración boliviana de obtener una salida al mar figura en una agenda de trece puntos con la que ambos países establecieron en 2006 un diálogo bilateral, que quedó en suspenso tras el anuncio, el pasado marzo, de que Bolivia iba a acudir a organizaciones internacionales para lograr ese objetivo.

Una de las alternativas propuestas por Chile consiste en otorgar a Bolivia una franja sin soberanía de siete kilómetros junto a la frontera con Perú.

Desde esa zona de la frontera terrestre parte la línea paralela imaginaria que marca la delimitación marítima actual, y que Perú, con su demanda ante la CIJ, quiere llevar hasta una línea equidistante a las costas de ambos países.

lunes, 4 de julio de 2011

Ministra insiste en el abuso de los chilenos

Ministra insiste en el abuso de los chilenos: "En una entrevista televisiva, la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, volvió a hablar sobre la incursión de 14 militares bolivianos en territorio chileno y que fueron apresados con denuncias de robo y extorsión cuando supuestamente realizaban operativos de control para evitar el ingreso al país de vehículos de contrabando. “Bolivia defenderá a sus militares. Los militares cuando estaban retornando al país ingresaron de manera involuntaria a territorio chileno. No estaban persiguiendo a nadie. No se dieron cuenta que estaban en territorio chileno. Los s trataron como delincuentes', reiteró la autoridad argumentando que las medidas de seguridad de chilenos eran innecesarias y que los 14 compatriotas recibieron un trato inhumano”, dijo. Recordemos que siete de esos catorce militares fueron condecorados y ascendidos posteriormente por el presidente Morales./Ejutv."

domingo, 26 de junio de 2011

de los cientos de textos sobre el incidente fronterizo el de Agustín Echalar en LT nos parece equilibrado. puntualiza con firmeza y rescata los hechos de manera imparcial.


Si partimos desde la vereda de la buena fe, y creemos que un grupo de esforzados soldados bolivianos, luchando contra el contrabando, cometieron el error de traspasar la frontera con Chile, igualmente, no queda otra alternativa que reconocer que nuestros soldados cometieron un grave error. Si a esto se añade el que los efectivos bolivianos, que obviamente estaban armados, fueron interceptados cuando se trasladaban en coches que tenían placa chilena y que estaban denunciados por robo, es comprensible que los soldados en cuestión hubieran sido confundidos, ya sea por impostores que se estaban haciendo pasar por militares bolivianos o por militares bolivianos que estuvieran dedicados a un acto delictivo. (Recordemos que no hace mucho, Chile tuvo una fehaciente demostración de cuan poco honorable puede ser un uniforme boliviano, me refiero por supuesto a Sanabria).
El que en un lapso de tan poco tiempo, no más de 72 horas, los militares bolivianos hubieran sido expulsados del país, podría ser visto como un gesto de parte de las autoridades chilenas de no hacer más ola con el asunto. El hecho no era un incidente insignificante, y el tiempo que tomó todo el proceso  fue increíblemente corto.
Ahora bien, las imágenes que se han visto en la televisión chilena de los momentos en que los soldados bolivianos eran trasladados de un recinto a otro, enmanillados y con las cabezas y caras cubiertas, son ciertamente denigrantes, pero no por el enmanillado, sino porque los soldados optaron por cubrirse las caras, como acostumbran hacerlo los presuntos delincuentes expuestos ante los medios de comunicación en nuestro país. Ese comportamiento muestra una cierta falta de dignidad. Digo, si esos oficiales del Ejército boliviano estaban cumpliendo a cabalidad con sus obligaciones, si estaban sirviendo a su patria en la noble lucha contra la criminalidad en la frontera, ¿por qué tenían que ocultar sus rostros? 
No crea usted amigo lector que quiero incriminar a los militares por un simple gesto, el que se hubieran escondido, el que no hubieran dado la cara, no los hace culpables de ningún delito, pero los muestra poco dignos, sin la entereza que se debería esperar precisamente de gente que tiene una formación militar. Seamos claros, el cruce de la frontera mostró una gran torpeza y la actitud a la hora de enfrentarse a la prensa chilena mostró falta de carácter. Difícilmente se pueden encontrar motivos para una condecoración.
La condecoración conferida el viernes pasado es un despropósito, no porque pudiera disgustar a Chile, sino por las razones arriba expuestas, pero la pretensión de hacer reclamos sobre una supuesta violación a los derechos humanos de los soldados es además una muestra de inaceptable cinismo por parte de Evo Morales. Valga la oportunidad para recordarle a Rolando Villena  las tareas que el Defensor del Pueblo tiene pendientes en lo que respecta a la violación de derechos humanos durante el régimen evista. ¿Recuerda amigo lector cómo algunos opositores al Gobierno fueron trasladados a La Paz, desde sus ciudades, con cinta adhesiva de embalajes alrededor de sus ojos? 
 
El autor es periodista independiente

sábado, 25 de junio de 2011

SOSTENGO. EN CHILE SE TOMA COMO UNA "PROVOCACIÓN" LA DECLARACIÓN DE HÉROES POR EVO A LOS CHUTOS UNIFORMADOS. TITULARES A TODA PÁGINA. TEMOR!


Duras palabras hacia Chile tuvo hoy el Presidente de Bolivia, Evo Morales, quien acusó a algunas autoridades chilenas de "defender el contrabando". Esto, en el marco de una actividad realizada en el regimiento Camacho Primero de Artillería de Oruro, en la cual se condecoró y se ascendió a los 14 militares bolivianos que la semana pasada fueron detenidos en Chile.

Según consigna el diario boliviano La Razón, el Mandatario de ese país dijo que "lamentamos mucho a nuestros subtenientes, sargentos, soldados detenidos. De acuerdo a información que hemos recibido, en Chile saben que están movilizados en la lucha contra el contrabando, y no puedo entender que algunas autoridades sean defensoras del contrabando en Chile".
Morales también acusó que los derechos humanos de los militares bolivianos fueron "violados", y cuestionó que autoridades chilenas, "por más que sean subalternas", hayan brindado un reconocimiento a los carabineros que detuvieron a los militares, en una clara alusión a las felicitaciones a los efectivos policiales entregadas ayer por el subsecretario del Interior, Rodrigo Ubilla.
"La agresión no es ninguna solución, y no puedo entender de que algunas autoridades (de Chile), por más que sean subalternas, reconozcan la violación a los derechos humanos. Dejar incomunicados a nuestros soldados, encapuchados, enmanillados, es una flagante violación a los derechos humanos", dijo.

Los 14 militares bolivianos fueron detenidos el pasado viernes 17 de junio circulando armados en territorio chileno. Su captura provocó, inicialmente, una queja formal de la Cancillería chilena, a la que Bolivia respondió el sábado pasado explicando que los militares cumplían funciones en la lucha contra el contrabando de vehículos.

Luego de esto, los uniformados fueron expulsados del país. Tras este episodio, varias autoridades bolivianas, como la ministra de Defensa, Cecilia Chacón, y los miembros de la Cámara de Diputados de Bolivia, han reclamado públicamente por el trato recibido por los soldados.

Hoy, los militares fueron condecorados y ascendidos, destacando su rol en la lucha contra el contrabando. Durante su discurso, Morales calificó la ceremonia de hoy como "una mañana histórica en Oruro, una mañana importante desde Oruro para Bolivia y desde Bolivia para los países vecinos".

viernes, 24 de junio de 2011

Humala durante su efímera visita a Bolivia ofreció un apoyo en la causa marítima eufórico pero "light" o sea fofo. lo destaca editorialmente El Deber

Durante su reciente visita a Bolivia, el presidente electo de Perú, Ollanta Humala, proclamó con voz tonante su apoyo “total” a la causa marítima boliviana. Lo hizo ante los periodistas, antes y después de su entrevista con su homólogo boliviano, Evo Morales, en un lujoso hotel de la capital paceña. 
En la oportunidad del encuentro no faltó el reportero que le disparara al visitante una pregunta alusiva a la vigencia del Tratado de 1929 por el cual se reserva al Perú la última palabra sobre cualquier posibilidad de que Chile le conceda a Bolivia una salida soberana al océano Pacífico por el norte de Arica, que hasta antes de la Guerra del Pacífico era de soberanía peruana. 
La respuesta de Humala fue tan concisa como vaga: “Apoyo total a la causa marítima boliviana”. Y nada más. Bajo esta generalidad, como todos sabemos, se agazapa una vía que de forma concreta solo enfila hacia apoyos puramente retóricos, hasta ahora limitados, en la escena mundial. Nos referimos a la multilateralidad, un escenario donde respecto al tema ciertos tratados internacionales constituyen todo un obstáculo para que por este rumbo Bolivia obtenga un acceso soberano a las costas marítimas.
Consciente de la importancia que para Bolivia entraña la cuestión marítima y que sobre el particular el asunto cobraría particular relevancia durante su visita al país, Humala trató de concentrar la atención del público en su hilarante propuesta de restablecimiento de la Confederación Perú-Boliviana. Alegando que Perú y Bolivia se igualan en la historia y en características nacionales, se pronunció por la conveniencia de borrar el hito fronterizo que separa a ambas naciones para que se conviertan en una sola. ¡Como si viviéramos en los tiempos del Mariscal Andrés de Santa Cruz y no en los actuales de una globalización económica a prueba de fronteras!
Un ardid retórico que, por cierto, defraudó a los bolivianos. Sobre todo, a aquellos que esperaban que por su presunto parentesco ideológico-político con los que hoy rigen Bolivia, Humala apoyara de forma incuestionable la demanda boliviana de acceso soberano al Pacífico. ¿Cómo? Pues, para empezar, manifestando claramente su propósito de plantear en Perú la devolución a Chile del candado a la reivindicación marítima que esta nación pusiera en sus manos con la firma del Tratado de 1929.
Mientras no se rompa tan censurable cerrojo, Perú le seguirá sirviendo a Chile como fundamento crucial para oponerse a una cesión territorial de acceso soberano al mar a Bolivia por el norte de Arica. 
Salta a la vista que Humala evitará tal desenlace porque quiere mantener buenos negocios con Chile, igual que con todos los países de América Latina y del mundo, ante los cuales se esfuerza por proyectar una imagen de izquierdista moderado, parecida a la del brasileño Lula y distante de las del venezolano Chávez o del propio Evo Morales.