lunes, 22 de marzo de 2010

mayoría abrumadora del 71% de El Alto considera pendiente el tema del mar con Chile.

Los bolivianos parecen tener cada vez menos presente el tema del mar a la hora de pensar en Chile. Un pensar que si bien mayoritariamente todavía se traduce en términos de conflictos, según demuestra una encuesta de percepción realizada por la empresa CIES Internacional, para La Razón, poco a poco va dando paso a una mirada más amable respecto de los vecinos.
La mencionada encuesta, que se centra en cuatro ciudades del eje central del país (habría que escuchar lo que dicen los potosinos respecto del Silala, que aparece en segundo lugar de la encuesta a la hora de identificar problemas pendientes), arroja datos que se pueden leer de diversas maneras, inclusive opuestas.
Por un lado, si bien la mayoría (46%) de la gente considera que hay conflictos irresueltos con el país vecino, los que no ven problema alguno (42%) más los que admiten no conocer del tema (12%) suman un preocupante o alentador, según se vea, 54% de los bolivianos.
Quienes mantienen alto el porcentaje “conflictivo” están en El Alto (71%) —cuya población provocó la caída de Gonzalo Sánchez de Lozada, justamente porque éste pretendió dar por superado el tema marítimo para exportar el gas por Chile— y La Paz (46%). A medida que se toma distancia de éstas, la percepción se hace menos negativa sobre las relaciones con los vecinos: Cochabamba (36%) y Santa Cruz (27%).
Por otro lado, entre todos los consultados existe una valoración positiva acerca de los chilenos, a quienes se considera amistosos: tanto a los ciudadanos como a su gobierno.
Si la lectura va por el lado alentador, se podría decir que aún existe una gran parte de bolivianos que mantiene viva la aspiración de retornar al mar, en la medida en que no olvida que hay un problema latente. Y que, pese a ser así, hay también la disponibilidad de avanzar en relaciones de confianza con Chile.
Si la lectura es pesimista, los datos citados hacen ver un país dividido, sobre todo El Alto y Santa Cruz que aparecen como polos opuestos. De paso, se puede hablar de una población muy poco informada, con bajo nivel de análisis, y, por ello, dispuesta a superar lo que los antepasados han defendido aun con su vida.
En lo que sí no hay duda es en el desconocimiento de la política que el gobierno de Evo Morales maneja en este campo. La Diplomacia de los Pueblos, que se supone involucra a los ciudadanos y que toma en cuenta su voluntad para definir los pasos que se dará respecto de las relaciones con Chile, es apenas un eslogan. El 88% de los consultados admite no conocer de esta estrategia.
Y mientras tanto, el tiempo corre y Bolivia se apresta a recordar que hace 131 años le fue arrebatado su territorio sobre el Pacífico.

sigue viva la llama de la reivindicación marítima no obstante la frustrada negociación distrativa de Evo

Exhortación del Comité Pro Mar Boliviano

Bolivia no debe renunciar jamás a la reivindicación de su Litoral arrebatado. La voz del Comité Pro Mar ha sido en este orden infatigable desde su fundación, lo será para siempre y se mantendrá firme en el futuro. Ello está inscrito en todas sus publicaciones de prensa, así como en documentos insertos en una fecunda bibliogracía nacional. El Comité está identificado plenamente con la defensa que hicieron intelectuales bolivianos, políticos, escritores consagrados y grandes personalidades del país de ayer y de hoy, todos defensores intransigentes de la reivindicacion.
Su trayectoria institucional, ha sido recogida oportunamente por diarios nacionales tan prestigiosos como Los Tiempos, Opinión, El Diario, La Prensa, La Razón, El Deber y varios otros de amplia circulación, así como por los diferentes medios de comunicación consecuentes con el pensamiento y la acción de todos los bolivianos que aman y veneran la Patria y que, de un modo permanente insuflan en la mente y el corazón de los bolivianos, especialmente de nuestra juventud, la esperanza que en un futuro lejano se cumplirá la idea fuerza de volver al mar que nos pertenece por designio de Dios y de la Naturaleza. ese anhelo será algýun día realidad por el camino de la refención reivindicativa, único y verdadero frente contra Chile, principalmente cuando el pueblo de Bolivia recuerde con dolor aquel aciago 14 de febrero de 1879, episodio trágico que destruyó la hermandad de los pueblos de América.

Sigamos adelante.

"EL MAR NOS PERTENECE POR DERECHO, RECUPERARLO ES UN DEBER"

domingo, 21 de marzo de 2010

la juventud boliviana expresó su total desacuerdo por el tratado con Chile de 1904 que enajenó nuestro Litoral entregándolo al enemigo

Los universitarios de Cochabamba, tan pronto como el 5 de febrero de 1905 se pronunciaron ante la desmembración de Bolivia por las tropas del ejército de Chile.

Los universitarios informados de haber sido entregado a Chile el Departamento del Litoral, y los territorios de Chilcaya y Ascotán mediante los tratados aprobados por el Congreso Nacional, cumple un deber sagrado de manifestar que no son aceptables dichos pactos porque son lasivos a la honra y dignidad de la Patria y contrarios a sus primordiales intereses económicos y sociales en general a más de hallarse opuesto a la voluntad del Pueblo Boliviano, como lo acreditan las agrupaciones políticas que han luchado y luchan en contra del oficialismo imperante.

Los gestores de la administración pública que dieron término a los asuntos con el Brasil, mediante la vergonzosa cesión del basto territorio del Acre, han llevado pues adelante sus propósitos de la infamante desmembración, comprometiendo la Soberanía Boliviana, al clausurar la única salida libre a los mares.

Callar por más tiempo, ante una política que parece arrastrar a la República a su polonización espontánea, no es digno de ciudadanos que aman las instituciones y se hallan dispuestos a defender la integridad nacional.

Nos corresponde por tanto, hacer constar solemnemente la reprobación que hacemos a objeto de fijar y no confundir la noble conducta de los que se han esforzado en sostener la Soberanía de la Patria, con el digno proceder de los que han viliplendiado a Bolivia, mostandola ante el mundo como Nación imbécil y sin sangre. Los congresales que han dado su voto contra los mencionados pactos, son merecedores de nuestro respeto y gratitud, los que han vendido a voto a favor de esos pactos, han dejado de ser bolivianos, por más que un oficialismo deletéro los ampare y resguarde.

Al finalizar nuestra palabra de franca e imprescindible protesta, llamamos la atención de nuestros conciudadanos sobre la capital circunstancia de que los Congresos que anualmente reúnen, tanto en sesiones ordinaria o extraordinarias carecen de potestad constitucional para ceder territorios, porque la Constitución misma expresa que la sobernía es inalienable y reside en la Nación, de la que hace parte el Territorio.

En consecuencia era y es indispensable que una Convención Nacional, solucione los asuntos que se refieren a nuestras fronteras, teniendo en cuenta que para dichas soluciones, no se debe escuchar la interesada voz de unas cuentos negociantes que e adueñan del Gobierno, en épocas negastas, sino la voz propiamente dicha, asentimiento de los vecindarios y los dictador del Honor y de la Justicia que hasta hoy guiaron noblemente a la República de Bolivia, en medio de mayores dificultades, como atestigua su Historia.

Suscribieron el histórico documento de la juventud boliviana ilustres estudiantes de las facultades de Derecho y de Teología. en la columna de la izquiera hemos registrado sus nombres que quedaron como letras de molde de bolivianos verazmente patriotas. De los más conocidos internacionalmente hemos realizado menciones, pero los nombres son muchos y de todos los cursos de ambas facultades.