jueves, 22 de agosto de 2013

Es Bolivia realmente un pais "amenazado"? se pregunta El Deber y responde que si en verdad pende alguna amenaza interna o externa capaz de arrebatar el sueño a sus habitante o por el contrario es Evo y Alvaro que utilizan el tema para "un rearme" que nadie explica

E l Gobierno, a través del vicepresidente, ha anunciado la compra de armamento para reponer los 36 misiles chinos tierra-aire que en 2005 fueron entregados a autoridades militares de EEUU para que fueran desactivados en ese país. Será un armamento similar o mejor al que es objeto de acusaciones de ida y vuelta sobre una responsabilidad que nadie asume respecto a la cuestionada entrega.
Para el ‘rearme’ boliviano, las gestiones parecen estar avanzadas porque el embajador ruso en La Paz ha hecho conocer el arribo de una misión militar de su país para negociar la venta de armamento por un monto todavía no precisado.

El vicepresidente no ha dejado de proclamar que Bolivia es un país pacifista, incapaz de atacar a nadie, pero que está obligado a tener nuevamente las mismas o mejores armas defensivas para protegerse de cualquier agresión extranjera. Un parlamentario oficialista, con afán incontenible de aportar algo al tema, se refirió a la necesidad de tener ‘misiles defensivos’ para contrarrestar una eventual “invasión extranjera”. A su vez, el comandante general de las FFAA –ya declaradas oficialmente como “socialistas, nacionalistas y antimperialistas”– convocó a los movimientos sociales afines al Gobierno para defender la soberanía, la dignidad y la unidad del Estado ante amenazas “internas y externas” imputables a opositores y, cuándo no, al ‘imperio’ estadounidense, respectivamente.

Con probable cargo a las hasta ahora maravillosamente pródigas arcas del Estado, las fuerzas vivas o milicias populares serán sometidas a un programa de instrucción cívico-militar para que sean capaces de conjurar cualquier peligro contra la patria y el proceso de cambio, según lo anunciado por el jefe militar.

Una oposición desarticulada y sin rumbo claro está lejos de representar una ‘amenaza’ para el régimen actual mientras que en el vecindario continental, los únicos movimientos que pudieran despertar algún recelo se registran bordeando las fronteras nacionales infectadas por el narcotráfico y el contrabando. Es así que Brasil ha desplazado tropas hacia la extensa línea fronteriza con Bolivia para frenar a los ‘narcos’ y evitar que inunden de droga su territorio. Chile también ha tomado sus recaudos.

No obstante, convendría auscultar criterios especializados para establecer con precisión si sobre Bolivia, uno de los países más desvalidos del mundo, “pacifista e incapaz de atacar a nadie”, pende realmente alguna amenaza interna o externa capaz de arrebatar el sueño a sus ciudadanos

martes, 13 de agosto de 2013

la expresidenta de Chile Bachelet, en quién Evo parecía haber puesto toda su esperanza, ha reiterado que Bolivia cometió un error al acudir a los tribunales de La Haya.

"Cuando Bolivia optó por ir a La Haya, dije que nos parecía un error que lamentábamos, puesto que creíamos que con la política del diálogo se podía avanzar de forma importante", dijo la exmandataria en un encuentro con corresponsales extranjeros.


Pero, "más allá de lo que suceda en La Haya, siempre con nuetros vecinos tenemos que tener una agenda variada, múltiple (...), una relación inteligente que nos permita como naciones seguir avanzando", agregó.
Bolivia demandó a Chile ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya, el máximo tribunal internacional de las Naciones Unidas, en abril pasado, con el fin de que emita un fallo que obligue a Santiago a negociar la entrega de una salida soberana al mar que perdió en una guerra librada a fines del siglo XIX.
Durante el anterior gobierno de Bachelet (2006-2010), ambos países pusieron en marcha una agenda de trabajo conjunta de varios puntos, entre ellos una solución a la demanda marítima boliviana.
Con la llegada al poder del derechista Sebastián Piñera en 2010, las relaciones entre ambos países -que carecen de vínculos diplomáticos formales desde 1978-, se tornaron más tensas, hasta el punto de semicongelarse tras la presentación de la demanda en La Haya.
Recientemente el gobierno de Morales, expresó su esperanza de que con un eventual triunfo de Bachelet se mejoren las relaciones entre ambos países.

jueves, 8 de agosto de 2013

Deuda de Brasil a los Ferrocarriles de Bolivia. Artículo del ex-senador Gonzalo Molina. meticuloso razonamiento que tendrá que prosperar en forma ineludible.

Si los Tratados Internacionales deben ser honrados, entonces, Brasil debe construir a su costo, la ferrovía Aiquile -  Santa Cruz de acuerdo  al “Tratado de Límites y Comunicaciones Ferroviarias entre Bolivia y Brasil” firmado en Rio de Janeiro en Diciembre de 1928 por los Plenipotenciarios Fabián Vaca Chávez y Octavio Mangabeira  al término de una guerra en la que perdimos el territorio mayor de 490.430 kilómetros cuadrados y se dio por finalizado el conflicto con obligaciones pendientes referidas al Tratado anterior (Petrópolis 1903) mediante la vinculación ferroviaria entre los dos países.

Con el objetivo de poblar El Acre, el presidente Pando opta por formalizar un contrato con la empresa norteamericana “The Bolivian Sindicate”, Brasil reacciona airadamente en 1907 y el Canciller Barón de Rio Branco propone oficialmente a Bolivia, la opción de un canje territorial o la adquisición del mismo por compra. Ante la negativa del Gobierno de Bolivia, los brasileños determinan el alzamiento de los colonizadores y Bolivia se ve forzada a abandonar su territorio.

En diciembre de 1928, los Plenipotenciarios, celebran el nuevo y último Tratado en dos ejemplares en lengua castellana y portuguesa, (en internet se advierte que lo hicieron en portuñol). El artículo quinto dice textualmente: “Habiendo los dos Gobiernos concordado en que no se llevó a efecto la construcción del ramal ferroviario entre Villa Mourtiho, u otro punto próximo y Villa Bella, en la confluencia del rio Beni y del Mamoré, obra que  el Brasil se obligó a realizar, en virtud del artículo séptimo del Tratado de 17 de Noviembre  de 1903 y siendo conveniente para ambos países que se efectúe del modo más eficaz la circulación comercial prevista en aquel Tratado, queda estipulada la sustitución de la obligación aludida por un auxilio del Brasil a la realización de un plan de construcciones ferroviarias que ligando Cochabamba con Santa Cruz de la Sierra, se prolongue en lugar que permita el contacto con la red ferroviaria brasileña.”

A la conclusión de la Guerra del Acre y en este espacio, merece nuestro homenaje el Héroe Nacional don Bruno Racua Tububay,   Brasil compromete a manera de compensación y a su costo, la construcción de la ferrovía Aiquile – Santa Cruz.  Ahora nos explicamos porque el amable obsequio de los Presidentes Brasileños don Emilio Garrastazú y don Ernesto Geissel en 1972 a Bolivia, de los estudios de ingeniería a trazo final del tramo Aiquile Santa Cruz mas el trazo  Mataral, Valle Grande, Zudáñez, Tarabuco, Sucre, que por ahora reposan, en la obscuridad y el silencio de los archivos nacionales de Brasil y de Bolivia, sin ser ejecutados.

La época, fue muy difícil para Bolivia: la descomposición interna producto de la guerra del Pacífico, la pobreza, el ejército diezmado,  la firma del tratado de 1904 con Chile y la presión de los países vecinos que tenían a Bolivia en la boca de un alicate cuando procurábamos aligerar  pugnas, alegatos, invasiones y guerras con vecinos desiguales y despiadados con estructuras de poder implacables.

 Hoy,  agosto 2013, desde Cochabamba, queremos pulsar la  alarmay alertar la existencia de los Tratados de 1903 (Petrópolis) y 1928, la pérdida mayor de nuestro territorio y la demarcación de límites al norte, realizada únicamente por Brasil, sin la presencia de una comisión boliviana que deja, entre otras cosas, pendiente el compromiso brasileño de construir a su costo la línea ferroviaria  Aiquile -  Santa Cruz con el trazo intermedio Mataral, Valle Grande, Zudañez, Tarabuco Sucre o como sugiere el Ing. Carlos Velasco L. Aiquile -  Sucre.

Para emprender negociaciones referidas al cumplimiento del Tratado, es necesario promover un completo y veraz estudio con Brasil. Estamos conscientes de que los intelectuales, historiadores, diplomáticos y políticos, analizan las operaciones de los sistemas internacionales pero son  los estadistas los que  tienen el deber de ejecutarlas.